Por Ana María Ureña
El candidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) es un pobre infeliz, que no despegará jamás, pero que sus títiriteros lo colocan hasta por encima del que se ventila como ganador por todas las mediciones tanto «cientificas» como las verdaderas que están realizando grupos de jóvenes en las calles.
A Gonzalo Castillo, las encuestas que Danilo Medina, ha comprado con el Presupuesto General del Estado, como esta vegüenza llamada Sigma Dos, que ha recibido unos chelitos y según el documento su contrato es de 20 millones 400 mil pesos (RD$20,000,000.00), lo colocan con un porcentaje duplicado del que verdaderamente tiene, porque no se puede negar hay miles de empleados públicos que al cuestionarseles contestan que votarán por el PLD, ya sea verdad, por pensar que van a ser sustituidos o mentira, porque no se atreven adecir que lo harán por Leonel o por Luis.
Sigma Dos en su más reciente falsa, se atrevió, tuvo el tupé, de colocar al candidato de su cliente, a Gonzalo Castillo, por encima del candidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM) Luis Abinader.
Es una estrategia fallida que no da resultados, como lo comprueban los computos finales del pasado 15 de marzo. Aunque el científico español Sebastián Algarín Ubañez, del Grupo Elite, de España, piense que resulte o lo recomiende para entretener a su cliente.
Elite, que fue contratado para asesorar al Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en la campaña política de Gonzalo Castillo, recomienda a José Ramón Peralta, continuar presentándole al pueblo las encuestas falsas a que nos tiene acostumbrados.
El Partido de la Liberación Dominicana (PLD) sabe que no tiene nada que buscar en las elecciones del día 5, del próximo mes, que no sea algunos que otros diputados y senadores.
En la imagen: Arriba a la izquierda, el contrato por RD$20,000,000.00 de Sigma Dos y la Presidencia; a la derecha el pago de Sigma a la Presidencia; abajo, a la izquierda, encuesta que posiciona a Leonel, en segundo lugar y a la derecha, la de Greenberg.